27/11/2025 01:30
Por FELAChihuahua, Chih.- El reciente intercambio entre el alcalde Marco Bonilla y dirigentes de Morena volvió a poner sobre la mesa, la delgada línea entre la comunicación institucional y la promoción política en tiempos no electorales.
Mientras el partido acusa presuntos actos anticipados de campaña por actividades como el calcatón del 22 de noviembre y las mantas mostradas en el Desfile de la Revolución Mexicana, expertos señalan que este tipo de controversias suelen derivar en revisiones más estrictas sobre la manera en que los gobiernos municipales difunden sus acciones.
Mientras el partido acusa presuntos actos anticipados de campaña por actividades como el calcatón del 22 de noviembre y las mantas mostradas en el Desfile de la Revolución Mexicana, expertos señalan que este tipo de controversias suelen derivar en revisiones más estrictas sobre la manera en que los gobiernos municipales difunden sus acciones.
Más allá de las declaraciones cruzadas, el eventual proceso ante las autoridades electorales podría sentar criterios que afecten no sólo a la administración capitalina, sino también a otros municipios en el estado que enfrentan retos similares para comunicar obras, actividades deportivas y participación ciudadana sin incurrir en faltas.
El llamado de Bonilla a que la ciudad “sigue trabajando con normalidad” y la insistencia de Morena en que sólo buscan una investigación formal muestran que el tema trasciende el pleito partidista y abre un nuevo capítulo en la discusión sobre reglas, límites y transparencia en la función pública.
El llamado de Bonilla a que la ciudad “sigue trabajando con normalidad” y la insistencia de Morena en que sólo buscan una investigación formal muestran que el tema trasciende el pleito partidista y abre un nuevo capítulo en la discusión sobre reglas, límites y transparencia en la función pública.


